El debut de Spreen en la Liga Argentina: ¿excesos del marketing o la nueva realidad del deporte?

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Storybakers:

En Argentina están heridos.

Consideran que el Deportivo Riestra ha escrito una de las más grandes ofensas en la historia del futbol argentino.

Están indignados porque le ha regalado un minuto como futbolista profesional a un creador de contenido en su partido frente al Vélez Sarsfield.

Están indignados porque consideran que es una ofensa para todos los futbolistas que luchan por un espacio desde el potrero.

El Deportivo Riestra se defiende.

Argumenta que su iniciativa encaja con los dichos de Florentino Pérez respecto a que urge rejuvenecer la audiencia en torno al deporte profesional.

Advierten que lo que intentaron fue crear un encuentro entre dos mundos.

Entre el deporte de siempre y las nuevas generaciones abanderadas por los influencers.

Así lo dice su comunicado:

En él también se cataloga a este debut de Spreen como una acción de marketing.

Los resultados, si se cataloga como tal, son destacados para el Deportivo Riestra.

Destaca que el propio club en sus historias de Instagram expresa emoción y arrepentimiento a la vez.

Primero, reacciona a un tuit en el que Germán García Grova, periodista de TyC Sports, enlista uno a uno los números alcanzados por dicha acción de marketing.

A decir de los cohetes, al Deportivo Riestra le gustó el resultado.

Nunca antes había protagonizado un momento mediático con más de 256 millones de vistas.

A nivel marketing, el Deportivo Riestra nunca había sido nota a nivel mundial.

Conseguirlo cuando el torneo local vive uno de sus momentos más bajos tiene su parte de mérito.

Pero enseguida, una vez que llegó el reproche de la industria, el Deportivo Riestra compartió ese comunicado en el que se arrepiente de lo hecho.

En que reconoce que sus acciones generaron reproche en la fanaticada argentina.

Entre los inconformes, nadie con palabras tan precisas como Braian Romero.

El jugador de Vélez Sarsfield, con una historia personal desde lo más bajo, calificó de falta de respeto hacia el futbol.

De un mensaje equivocado a la sociedad y a los niños que sueñan con ser futbolistas profesionales.

"El mensaje es para los chicos que están del otro lado: hoy la TV les mostró un atajo que no es ese. Esto fue una falta de respeto hacia el fútbol. Es un mensaje erróneo que le damos a la sociedad y a los chicos, a los que lo intentan hasta lo último y no pueden"

Habló de atajos que no son los correctos.

De mensajes que lastiman como sociedad.

A esa inconformidad se ha sumado el que el Tribunal de Ética de la AFA ha iniciado una investigación en contra del Deportivo Riestra al señalar conductas que podrían perjudicar la reputación del futbol argentino.

Se ha especulado también con que las casas de apuestas podrían estar involucradas.

En las horas previas a su debut, distintas casas de apuestas habilitaron momios específicos en torno a la posible participación del tercer streamer latinoamericano más grande del mundo.

Se ha hablado mucho de la participación que tuvo Speed, bebida energética que guarda relación tanto con Spreen como con el Deportivo Riestra, al ser patrocinador del club.

Pero lo más relevante de este caso pasa por preguntarse hásta dónde puede y debe llegar el marketing con tal de alcanzar notoriedad.

¿Es en verdad una ofensa al futbol argentino alinear por 60 segundos a un streamer que genera más de 6.5 millones de horas visualizadas al mes en Kick?

¿Está o no en su derecho un club de alinear a quien le plazca aunque ello le representa una desventaja deportiva?

Aún después de los cuestionamientos, ¿en verdad el Deportivo Riestra se arrepiente de lo ocurrido pese a la notoriedad mundial que alcanzó?

¿Podría llegar a normalizarse que el cupo de un jugador tuviera que ver mucho más con marketing y entretenimiento que con calidad futbolística?

Ya se hablaba de ello con futbolistas de gran calidad que también eran especialistas en vender jerseys.

Para eso nadie como David Beckham.

Entre los medios deportivos existe la costumbre de calificar a determinados futbolistas como producto del marketing más que del talento futbolístico.

Pero a lo que llegamos con Spreen es a ocupar puestos para futbolistas reales en cameos mercadológicos.

¿Es este cameo más insultante que una librería con los influencers dominando las listas de los bestsellers?

¿Es este cameo igual, peor o menos ofensivo que el de las películas animadas que prefieren a influencers que a actores de doblaje en su adaptación a otros idiomas?

En la era de la fama antes que el mérito, ¿hasta dónde la Asociación de Futbol Argentino tendría que impedir que un equipo combine el deporte con el entretenimiento?

Es natural que lluevan los cuestionamientos.

Es en Argentina donde ha ocurrido.

En el país Campeón del Mundo.

En la tierra de Messi y Maradona.

Lo que está por verse es por cuanto tiempo más el deporte profesional seguirá pudiendo ser lo que siempre fue.

¿Encontrará el punto medio o se perderá en este tipo de excesos?

A la Kings League, por ejemplo, le ha ido afectando pretender ser percibida como una competencia seria.

Aunque nació como entretenimiento, su área de prensa pretende que los medios se comporten igual a como lo harían cubriendo el deporte profesional.

En la Kings League Americas, a los reporteros o periodistas no se les permite alentar de manera abierta a un equipo en la arena.

No tienen permitido gritar consignas en contra de los jugadores o de los técnicos que están participando.

Se entiende si nos apegamos al rol tradicional de los medios.

Pero no se entiende cuando se supone que la Kings League nació como el nuevo futbol.

Como ese futbol que sí que conecta con las nuevas generaciones.

Mientras que el nuevo deporte se plantea hasta dónde debe parecerse al deporte tradicional.

Al deporte tradicional se le vienen múltiples dilemas éticos y existenciales para encontrar su lugar.

Se entiende que la opinión más generalizada es que al juego hay que tomárselo en serio.

Que no se puede regalar un cambio para darle presencia a un streamer por sesenta segundos.

Pero es también cierto que el éxito deportivo está reservado para unos cuantos.

Que el Real Madrid o el Barcelona no se pueden permitir fallar.

Que el Manchester City o el Bayern Munich tienen que estar arriba.

¿Y los demás?

Son esos los que más se permitirán experimentar.

Son esos los que deberían atreverse a más.

Vamos, que del Real Madrid y el Barcelona se habla de sus títulos, de sus futbolistas y de sus figuras.

Pero del Deportivo Riestra o se habla de Spreen o nadie se acuerda de él.

De ese tamaño es la disyuntiva que aterriza en el deporte profesional.