El Kun Agüero y Star+: futbolistas y streamers, el nuevo second screen del futbol
Lo que la Watch Party del Kun Agüero nos dice del Mundial y de la streaming wars
Storybakers:
Quiero compartirles un par de anuncios:
1) Mario Vidal, jefe de innovación de El Español, me ha invitado a ser parte de su podcast “Me gusta, Me enfada”, un reportaje auditivo para entender cómo nos relacionamos con las redes sociales.
Ahí comparto mis opiniones con el propio Mario, con gente como David Murciano, Ana Aldea y Mercedes Bermejo.
Aquí el primer episodio:
2) Regresa el ranking social de medios:
Tras un par de meses de ausencia por modificaciones al producto que pronto les estaré anunciando, vuelve el ranking social de medios presentado por Story Baker en alianza con Emplifi.
Pueden ir a él aquí.
Esta ocasión no lo hago como envío directo ya que quiero empezar a experimentar con este newsletter como punto de partida a más contenidos sobre la industria que nos apasiona.
Como una especie de concentradora de distintas apuestas para crecer la oferta que están recibiendo.
Para cualquier comentario o sugerencia sobre el ranking social de medios por favor escríbanme a maca@storybaker.co
Una notable estrategia de adquisición de usuarios, una transmisión alternativa, una fuente de información para los medios y de conversación para los redes sociales.
Todo eso fue la Watch Party del Kun Agüero con Star+ para todo Latinoamérica durante la semifinal de ida entre el Manchester City y el Real Madrid.
A nivel marketing, pocas ideas tan poderosas como provocar que al aficionado se le haga agua la boca por ver eso que está ocurriendo en el momento y que está viviendo un creador al que sigue con devoción.
Si quieres ver lo que está viendo el Kun, más vale que enciendas Star+ o ESPN (excepto en México y Brasil, donde la Champions pasa por HBO Max y TNT Sports).
Si lo que te interesa es más la conversación que el juego en sí mismo, o si de pronto el partido tuviera un bajón de nivel (que no fue el caso del extraordinario partido entre el City y el Madrid), tenías la opción de seguir la transmisión especial en Star+ o directo en Twitch.
Y si eras un periodista, más valía que estuvieras al pendiente de lo que el Kun y sus invitados dijeran.
Como que Balotelli declarara que le gustaría jugar en Boca Juniors y que si Juan Román Riquelme lo llama, con gusto volaría a la Argentina.
O como cuando Agüero confesó que a Guardiola le costó entender su modo de entrenar.
Vamos, que todos los involucrados en la cadena de valor para que de ahí surgiera algo útil terminan estando bien atendidos.
Los fanáticos con la opción de seguir a un creador de contenidos que tiene experiencia fresca en la memoria en el City.
Star+ con una activación publicitaria que da de qué hablar tras haber firmado al Kun como si fuera Homero Simpson, Emma Watson o las Kardashian.
Los periodistas por encontrar ahí las declaraciones que ya no pueden conseguir por cuenta propia ante los espacios que cada vez se cierran más.
¿El resultado?
-Más de 23 mil espectadores concurrentes en el momento pico (medio tiempo del partido)
-Más de 18 mil espectadores en promedio
-63 mil horas de visualización
-13 mil followers nuevos
+ de 600 mil vistas totales tras streamear por espacio de 3 horas con 29 minutos
Twitch, a partir de sus streamers, se hace partícipe de la conversación de video en vivo que antes correspondía en exclusiva a la televisión.
El pre y el post ya no sólo está integrado por las televisoras con y sin derechos que se montan afuera de un estadio o desde los estudios para analizar lo que está por ocurrir y lo que ha ocurrido, sino que cualquiera desde casa (y mejor aún si no es cualquiera, como el Kun) tiene la capacidad de tener a una audiencia que decide que es a él al que quiere escuchar, que es con él con quien quiere conversar.
A esos dos tiempos habituales habría que sumar el entretiempo que desde las televisoras es usado para volcar publicidad, pero que desde Twitch se convierte en una conversación que no tiene por qué tener interrupciones. (claro, habrá que ver cómo va aterrizando la monetización)
Aquí la muestra gráfica del poder del stream en el pre, el inter y el post del juego.
La audiencia, además, se vale de una herramienta tan simple como letal en la comparación entre la transmisión televisiva y Twitch, YouTube o Instagram, para ser parte de la conversación: la posibilidad de lanzar comentarios y preguntas en vivo desde el chat.
De ahí, de una pregunta del público, ha surgido la interrogante que luego fue replicada por los medios.
¿Dónde le gustaría jugar a Balotelli si llegara a Argentina?
Mario dijo que en Boca.
Y entonces todos los xeneizes se volvieron locos.
Los creadores no necesitan derechos de transmisión para mover a sus comunidades.
Pero es cierto también que pronto podrían llegar a tenerlos.
Hace unos meses escribía que el futuro del deporte profesional podría no pasar por la exclusividad en los derechos de transmisión, sino por la democratización de los mismos.
Si en vez de que los derechos los tuviera HBO Max, Sky o Fox Sports, los tuvieran Google, Tik Tok o Twitch, podríamos imaginar una transmisión en vivo posible para todos.
Si la música es de uso libre bajo los parámetros de Tik Tok, el futbol también podría serlo para que cualquiera montara una transmisión.
Por ahora hemos de contentarnos con transmisiones alternativas de alto calado.
Más pronto que tarde llegaremos a ese escenario de democratización absoluta.
Ya me vi narrando el Mundial.
Y no nos preocupemos, que por más que todos podamos ser creadores, siempre habrá más consumidores que productores.
Únete a los grupos de Story Baker en Telegram
Media Links and Talks: lo que tienes que saber de la industria sin tenerque buscarlo en Twitter ;-)
La Podcastería: el punto de encontro para creadores de audio con ligas, ideas y recursos.
La Creator Economy: historias y briefing diario sobre la economía de los creadores que está cambiando al mundo
News de News: Todo sobre Newsletters
Desde el metaverso: el futuro de nuestra existencia digital
Manningcast, lo que los grandes deportistas pueden hacer con transmisiones alternativas
El deporte profesional entiende que sus formas no son las de las nuevas audiencias.
Que el resultado para esas nuevas audiencias y hasta para las ya existentes que no son hardcore puede no ser tan relevante como la oportunidad de socialización que ahí detrás de. los eventos deportivos.
Ya Bob Esponja y los personajes de Nickelodeon han tenido sus oportunidades en transmisiones alternativas dirigidos a públicos infantiles en un encuentro entre la pasión adulta y el entretenimiento para los hijos que de este modo se interesan por lo que de otro modo no querrían ver.
En su momento escribí sobre las enseñanzas que Fondo de Bikini les dejó a los medios.
Pero los personajes de carne y hueso también han ido rompiendo hitos en la Creator Economy que promete encontrar en la próxima Copa del Mundo su mejor pretexto para disputar de una vez por todas y en definitiva ese tiempo de sobremesa deportiva que tan propio era de la televisión.
La disrupción se está manifestando incluso desde las propias señales televisivas.
Cuando no es Bob Esponja, son Eli y Peyton Manning presentando el “Monday Night Football con Eli y Peyton”, o el Manningcast como terminó siendo conocido.
¿Qué es el Manningcast?
-Una transmisión alternativa del Monda Night Football en ESPN 2 protagonizada por los Manning producto de una alianza entre el propio ESPN y Omaha Productions, fundada por Peyton.
-En su primera temporada, que contempló 10 transmisiones, los Manning promediaron 1.6 millones de espectadores, alcanzando un pico de 1.96 millones de televidentes en la semana 8 entre los Gigantes de Nueva York y los Jefes de Kansas City.
-Entre sus invitados a estas transmisiones (en las que sí se utilizan derechos de transmisión) se encontraron Lebron James, Tom Brady, Condoleeza Rice, David Letterman y hasta Condoleeza Rice.
-Los Manning, producto de su primera temporada, ya cuentan con las 7 transmisiones alternativas más exitosas de todos los tiempos para ESPN.
-Su éxito ha sido tal que Disney anunció la extensión del acuerdo por 3 temporadas más, añadiendo el que próximamente Omaha Productions e ESPN lanzarán productos semejantes en otros deportes, como la UFC, el golf y el futbol americano colegial.
-Mientras ESPN se frota las manos con las nuevas transmisiones de los Manning, desde Amazon ya se preguntan cómo llevárselos al universo de Amazon Prime Video.
En resumen, aunque figuras como Tony Romo representan extraordinarios imanes de rating, cada vez queda más claro que a la audiencia no sólo le interesa tanto lo que un ex deportista pueda analizar de un juego, sino también y sobre todo cómo lo vive en compañía de sus amigos, sobre todo cuando estos son figuras reconocidas.
En el futuro próximo, cada gran juego estará acompañado de el equivalente a las salas de chats de antes, con un moderador que es en realidad un creador de contenido, audiencias específicas que deciden estar ahí y no en otro lugar y con las conversaciones fluyendo donde cada uno lo considere pertinente.
Queda pendiente la correcta integración de las apuestas a este tipo de transmisiones.
El deporte para ser entretenido requiere de conversación y de juego.
De la conversación ya se encargarán streamers, ex deportistas y celebridades, de la correcta implementación tecnológica para hacer de cada jugada una oportunidad de apostar, competir y ganar ya se encargarán las plataformas de streaming.
Por ahora, DAZN ha anunciado una alianza que se supone que acelerará la integración de las llamadas apuestas casuales a la experiencia de ver un juego en vivo.
La dinámica sería tan sencilla como apostar con tu control remoto o directo desde tu smartphone sincronizado con la transmisión en vivo para aprovechar esos micro-momentos que regalan los eventos deportivos.
Mi duda es si será DAZN el que termine haciéndolo.
Primero porque de a poco se ha ido desinflando su promesa de convertirse en el Netflix de los deportes.
Después porque frente a las dudas que ha generado el estancamiento de Netflix se ha vuelto a poner sobre la mesa la importancia del deporte para la streaming wars.
Tiene sentido.
Mientras que las series tienen un desgaste natural.
El interés por las competencias deportivas se sostiene año con año más allá de las variaciones generacionales que se puedan dar.
Hacerse con derechos es complicado.
También dominar la matemática del retorno de inversión.
Pero ahí donde HBO Max o Star+, dependiendo el mercado, tienen momentos muy puntuales con la Champions League para atraer suscriptores, Netflix pasa de largo.
Amazon ya ha apostado por la NFL.
Apple TV está probando con la MLB .
Disney tiene el propio Star+ e ESPN+ como fortalezas.
Netflix se queda solo.
¿Podría comprar DAZN?
Meras especulaciones.
Lo que queda claro es que el deporte y la conversación alrededor volverán a ser clave para efectos de paga por parte de los usuarios.