La Ibaificación del periodismo deportivo
Siro López y Pedrerol en España: Faitelson y Álvaro Morales en México, demuestran que lo que antes se cuestionaba de los streamers es ya la norma entre periodistas deportivos
Storybakers:
Este newsletter es presentado por Co-newsroom.
La incubadora de nuevos medios y periodistas creada por Story Baker para ayudarte a impulsar tu marca personal y a desarrollar tu propio medio.
Si quieres asesoría personalizada en un ambiente colectivo, acceso al día a día de mis reflexiones creativas y conocer en exclusiva todas las tendencias que marcan el ritmo de la industria, hazte miembro de Co-newsroom.
Nuevo episodio en The Coffee: la necesaria transformación de la academia para impulsar el nuevo periodismo
Ibai sólo hay uno.
Pero muchos quisieran serlo.
Muchos están jugando a serlo.
Incluyendo varios de los que en su momento cuestionaron los méritos de Ibai para tener la exclusiva con Messi en su presentación con el PSG.
O la de Luis Enrique tras la eliminación de España en el Mundial de Catar.
El periodismo deportivo para coexistir con Ibai no se ha distanciado de la naturaleza del streamer.
Se ha fusionado con él.
Ha decidido jugar bajo las mismas reglas.
A Ibai le funciona.
Al ecosistema de los streamers les funciona actuar como actúan.
Pero el resultado no queda tan claro cuando aplica al periodista deportivo convertido en streamer.
Porque empiezan a abundar las ofensas.
Estas, por cierto, mucho más personales y agresivas que lo que suele darse en el típico salseo entre creadores.
Los señalamientos entre periodistas deportivos son más que entretenimiento.
Son más que el show que adereza rivalidades entre streamers.
Apuntan a falta de ética.
Apuntan a acusaciones, en palabras de Siro López, que podrían llevar a Josep Pedrerol a la cárcel.
Apuntan a boicots orquestados por Pedrerol para que sus ex colaboradores no se hagan de un nuevo trabajo.
No es, en realidad, la condición de streamer de Siro López la que llama la atención.
Se trata de un periodista de referencia que a sus 67 años se ha montado una forma de vida a través de Twitch.
Tiene más de 304 mil seguidores en Twitch.
Más de 240 mil suscriptores en YouTube.
Es una figura de los medios tradicionales que se adaptó como pocos a las plataformas digitales.
Ha logrado, incluso, colocar oportunidades sobre la mesa que podrían beneficiar el entendimiento entre los medios tradicionales y los creadores.
Porque había llegado a un acuerdo con Marca para que una tertulia presentada por él y patrocinada por Estrella Galicia apareciera durante 4 meses en la portada del diario.
Pero Pedrerol, señala Siro, se ha encargado de bajarle ese acuerdo que tan buen alcance y posicionamiento representaba para el canal de Siro.
Suelta entonces que el creador del Chiringuito se ha dedicado a obstaculizar a ex colaboradores en su búsqueda de nuevas oportunidades laborales.
No es el primero que señala a Pedrerol de malas prácticas.
Lo mismo lo han señalado periodistas que futbolistas.
Lo de Vinicius, por ejemplo, alcanzó niveles que van más allá de una polémica.
La cacería contra Vinicius fue tal que otro periodista basado en YouTube se lanzó a un cruce de declaraciones con Pedrerol.
Lo de los streamers es divertido.
Lo de los streamers es producto de una relación entre amigos que de pronto se convierte en algo más.
Pero lo de los periodistas atacándose unos a otros es absolutamente tóxico.
Los límites cada vez se hacen más tenues.
Se está pasando de la discrepancia de opiniones a los señalamientos personales.
Y así los periodistas deportivos están consiguiendo viralidad.
Gerard Romero es otro caso.
Un tipo que supo transformar su carrera cuando no encontró lo que quería en las plataformas tradicionales.
Un tipo que lo mismo la rompe con una exclusiva mundial sobre el Barcelona que genera un clip viral por cómo festeja una suscripción en Twitch ante la mirada de perplejidad de Luis Suárez.
Pero también un tipo que exhibe a la redacción de AS en vivo con tal de exigr que se corrija una nota con la que no está de acuerdo.
En México el escenario no es distinto.
Ya no se trata de descalificar opiniones.
Se trata de agredir de forma directa.
De hablar de corrupción, de fracaso, de deshonestidad.
Y es ese el periodismo deportivo que más está destacando.
Es ese el que ha derivado en la contratación estelar de Televisa de uno de sus más grandes detractores históricos.
David Faitelson es la máxima figura de TUDN en la actualidad.
Es también el protagonista diaria de acusaciones de ida y vuelta que provocan que se hable de él.
Que los propios medios deportivos lo conviertan en nota.
Y que desde otras televisoras acusen de recibido para entonces contraatacar.
Aquí uno de los tantos señalamientos de Faitelson.
Aquí una indirecta con la que Álvaro Morales defiende a Tuca Ferretti.
Técnico histórico del futbol mexicano que se ha transformado en uno de los personajes más polémicos de la televisión mexicana.
Las nuevas plataformas han traído nuevas oportunidades para el nuevo y el viejo periodismo.
Pero también han traído tentaciones con las que el periodismo no está lidiando de forma inteligente.
Las líneas son cada vez más delgadas.
El periodismo ha convertido la relajación y la libertad creativa en libertinaje.
Mientras Ibai habla de robo arbitral en la Kings League, los periodistas se destrozan entre sí.
Rebasan todos los límites con tal de conseguir notoriedad.
Se dirá que Pedrerol lo tiene merecido.
Que varios de ellos son más presentadores que periodistas.
Pero para el público esas distinciones son incomprensibles.
El periodismo deportivo se ha convertido en un talk show.
Es divertido cuando lo hace Ibai.
Es preocupante cuando es lo que más abunda en el periodismo deportivo.
Como cada año, Story Baker presenta Tendencias 2024: el año de las historIAs. Un ejercicio colaborativo internacional que reúne a los máximos líderes de la industria de los medios y los contenidos para compartir las tendencias que marcarán el nuevo año.
Si estás interesado en impulsar productos, servicios y emprendimientos relacionados a la creación de contenido, al ejercicio periodístico y a la generación de data para entender la industria, escríbeme a maca@storybaker.co
The Muffin es un newsletter de publicación diaria en Substack y Linkedin leído por más de 11 mil 200 miembros de la industria de los contenidos a nivel mundial
Forma parte de Story Baker, un medio de medios que desarrolla contenido, estrategias, conferencias, consultorías y capacitaciones para los principales medios, empresas y creadores.
Trabajo en periodismo hace más de 25 años yconfieso que el tema de los streamers me gusta muchísimo. Es un espacio más orgánico en donde el suscriptor participa de manera directa y no necesita muchos recursos para salir al aire. Mi favorito es Gerard Romero, la dinámica de su programa diario es muy bueno y que haya creado una identidad con su equipo de Jijantes de la Kings League también es muy meritorio. Las polémicas entre periodistas han existido hace mucho tiempo, pero tipos como Faitelson a la postre caen mal porque son muy tóxicos.