Sony busca ir un paso más allá con su próxima consola casera. Para lograrlo, ya está trabajando en un nuevo dispositivo que espera sea mucho más potente que la actual PlayStation 4. Su actual consola ha vendido más de 80 millones de unidades desde que se lanzó en 2013.

Aunque la firma japonesa no ha confirmado sus planes, Kenichiro Yoshida, CEO de Sony, le dijo al Financial Times que “en este punto, lo que puedo decir es que es necesario tener un nuevo hardware de próxima generación”.

Diversos analistas le dijeron al periódico que Sony debería asegurarse que la consola se enfoque en los eSports. Aunque se lanzaría hasta después de mediados de 2020.

eSports, un negocio que nadie se quiere perder

Datos de la firma de investigación de mercado NewZoo indica que los ingresos mundiales de los deportes electrónicos alcanzaron los 655.3 millones de dólares en 2017, 150 millones más que en 2016.

Aunque la competencia luce feroz entre dispositivos móviles, PC y consolas, en el mercado de los eSports todavía hay espacio para todos. En 2017 alcanzó los 350 millones de usuarios en el mundo, pero el propio NewZoo augura que serán 550 millones de personas para 2021.

Sony ya va tarde para unirse a este negocio, aunque dio un paso importante abriendo su ecosistema para el cross-play de Fortnite.