Vidcon 2024: ¿Cómo hacer que los medios brillen tanto como los creadores?
Podcast: El Tiempo de Colombia explica sus razones para renunciar a Comscore
Nota del autor: Llego el día para encontrarnos en Vidcon 2024, donde este viernes hablaré del futuro del entretenimiento. Los veo a las 13:20 de la Ciudad de México. (Por cierto, entenderé si prefieren ver en vivo la pelea de Marco Verde que podría significar la primera medalla de oro mexicana en París 2024. Gracias Vidcon por escoger el peor horario posible para mi plática. 😆😆😆
Story Baker Podcast: He publicado el episodio de la semana en el podcast de Story Baker. Platiqué con José Carlos García de El Tiempo de Colombia, quien explica a detalle por qué decidieron renunciar a Comscore pese a estar en una posición de liderazgo.
A lo largo de la conversación vamos al detalle de las métricas cualitativas y cuantitativas, del sinsentido que representa seguir obsesionándose por el volumen y las alternativas que quedan para entregar mediciones que resulten confiables para los anunciantes y para los propios medios al evaluar su desempeño.
Storybakers:
Con la de hoy, será la tercera vez que se celebre Vidcon en México.
Será también la tercera vez que me toque participar.
Vidcon es un evento que desde su creación en Estados Unidos ha tenido foco en servir como punto de encuentro entre los creadores y sus comunidades.
En ese marco de interacción única entre los creadores y sus fanáticos, existe un track de industria.
Ahí están los medios, los anunciantes, las plataformas tecnológicas y el análisis de tendencias que están moviendo el mercado.
Por su propia naturaleza, el track de industria es mucho más sobrio y ejecutivo que el track de creadores y comunidad.
Pero no dejo de pensar que a la industria, y a los medios en especifico, les urge replantearse cómo encajar con los nuevos tiempos.
Cómo hacer que la industria parezca vanguardista.
Cómo hacer que la industria parezca innovadora.
Cómo hacer que sea algo más que un pretexto para hacer networking.
Cada año Vidcon sirve como referencia abrumadora respecto al arraigo de los creadores con sus comunidades.
Sirve también como indicador de que a la industria le falta algo para no ser más que la parte aburrida de un evento marcado por la celebración y el entusiasmo de quienes van a ver a sus creadores.
Esa perspectiva del track de industria como el menos inspirador de Vidcon se replica en cada encuentro de la industria.
Es, en parte, por su naturaleza misma.
Mientras que a los creadores los van a ver niños y adolescentes, el track de industria está conformado por ejecutivos de distintas organizaciones y plataformas.
Pero dejando de lado la obviedad de las diferencias, los eventos de los medios en lo específico no se presentan nunca como una celebración.
No hay fotógrafos que se encarguen de compartirte una foto que te genere orgullo llevar a tus redes sociales.
No ocurre ni como panelista ni como asistente.
No hay experiencias de interacción con las marcas que supuestamente tendrían que motivarnos.
Los eventos de las organizaciones periodísticas son más bien sombríos
Ajenos a la nueva forma de consumir contenido y de atraer la atención de los usuarios.
Hace años, como parte de la llegada de Emilio Azcárraga Jean a Televisa tras el fallecimiento de su padre, Televisa creó un evento de vinculación universitaria bajo el nombre de Espacio.
Era 1997.
Televisa aún era visto como el gran poder mediático mexicano.
Ese evento que Televisa realizó por varios años lograba captar la atención de estudiantes de todo el país.
Ahí se producía una interacción entre las nuevas generaciones y las piezas clave de la televisora.
Desde Emilio Azcárraga Jean hasta sus más notables presentadores y celebridades.
Así se presentaba:
Ese evento te inspiraba a ser parte de Televisa.
Te permitía interesarte e incluso enamorarte por lo que ahí se hacía.
Pero los medios en algún punto se han convencido de que son aburridos.
De que no tienen forma de inspirar ni de atraer a ese talento joven que hoy opta por consumir creadores y, lo que es peor, por estar desinteresado en llevar su obra como creadores incipientes a los nuevos medios.
¿Cómo se vería un evento de medios para el público en general?
¿Cómo se vería que hubiera experiencias de ESPN, CNN, Televisa, El País, el New York Times y marcas de nueva generación?
¿En verdad sería imposible atraer a las audiencias?
Lo primero sería intentarlo.
Deshacerse de la idea de que los únicos que pueden mover a las masas son los creadores.
A los medios, aunque resulte paradójico por la labor de sus reporteros, les falta calle.
Les falta cercanía con la audiencia.
Les falta dedicar tiempo a generar relaciones que vayan más allá del consumo de sus formatos.
Y, como siempre, les falta colaborar.
Porque para la gente sería atractivo encontrar en un mismo evento el festival de tacos de Chilango.
Una experiencia artística de Pictoline.
Una pop up experience de Time Out Market.
Un taller de creación de video corto con Ac2ality.
Una conferencia con Johnny Harris.
Un programa en vivo con Chumel Torres.
O ser parte de Futbol Picante de ESPN.
O comprar hoodies de Complex.
Para ser hay que parecer.
La industria no ha puesto manos a la obra.
Ni la de los medios ni la del entretenimiento en general.
Lo hará Netflix con la próxima apertura de las Netflix Houses.
Lo hacen, por supuesto, Disney y Universal.
Lo hace Nintendo también.
Se entiende que no todos puedan terminar armando un parque temático completo.
Lo que no se puede entender es que estemos tan negados a colaborar que no haya un solo evento de referencia que vincule a los medios y a las grandes plataformas de entretenimiento con la audiencia en general.
Y que en los encuentros de industria lo que continúe primando sea la relación pública, la autopromoción y, por qué no decirlo, la obsolescencia.
El periodismo debe reimaginarse.
Los medios deben actualizarse.
No todo es presupuesto.
Es cómo te presentas.
Es lo que haces y cómo lo haces.
Es cómo te percibes a ti mismo.
Y al menos en el track de industria de Vidcon están temáticas de nueva generación.
Pero en los eventos de medios no hay más que más de lo mismo una y otra vez.