YouTube: el first y el second screen, ¿qué ha hecho para convertirse en la nueva televisión?
Nota del autor: Escribo este newsletter desde el aeropuerto JFK de Nueva York tras realizar la cobertura del Made On YouTube 2024.
Ha sido un placer volver a sentir el periodismo de cerca cubriendo a una de las máximas generadoras de entretenimiento en el mundo.
Aquí la foto de los creadores y periodistas que tuvimos la oportunidad de asistir.
Storybakers:
El Living Room es ya una prioridad en YouTube.
Está en sus planes de conquista.
O más bien, en sus planes de expansión.
Porque es un hecho que ya ha logrado convertirse en la nueva televisión.
Que es YouTube la televisión que pasó del smartphone a la pantalla.
Y que es ahora la que se plantea ser tanto la first screen como la second screen.
Su rol para la industria del entretenimiento es de dominancia inédita.
Ha sido la primera plataforma de streaming en encabezar y superar el Nielsen Gauge Report con el 10.4% del visionado en Estados Unidos.
Ni siquiera Netflix lo ha conseguido.
YouTube ha ganado la Streaming Wars siendo para muchos una red social.
Es también el buscador de video más grande del mundo.
Y aspira a convertir el smartphone en el control remoto que le permita que la nueva televisión en la vieja televisión no pierda ni la interactividad ni las oportunidades de digital.
En el Made On YouTube 2024 no hubo anuncios al respecto, pero desde ya me anticipa Kurt Wilmes, Senior Director of Product Management de YouTube, que se trabaja sobre ello.
Que ya hay casos de éxito en materia de herramientas relacionadas al show que se está viendo para que los usuarios estén tan activos como cuando ven videos frente al smartphone.
En deportes, por ejemplo, YouTube ya experimenta dándole notoriedad al Fantasy Football en los juegos de la NFL.
Lo que sí que se anunció en el Made On es que habrá nuevas herramientas para que los usuarios de YouTube en la sala de estar escaneen códigos QR que los lleven al link que el creador les está recomendando.
De nuevo, el smartphone convertido en el mando de la interacción entre un creador y su comunidad.
Para YouTube será clave que la competencia que a sí mismo se ha generado conquistando una nueva pantalla no le reste hegemonía en la pantalla para la que fue concebida inicialmente.
Para los creadores será cada vez más relevante tanto la exposición como el ingreso que generen por su contenido visto en pantallas de televisión.
Reporta YouTube que el número de creadores que generan la mayoría de sus ingresos por esa vía crece a un ritmo del 30% anual.
Esa normalización de la nueva televisión en las pantallas de televisión demanda una sofisticación que ya está ocurriendo.
Esta imagen que muestro no es la de una serie de Netflix.
No es la de una producción de millones de dólares pensada originalmente para jugar un rol clave en la Streaming Wars.
Es el canal de YouTube de una creadora con sus episodios divididos en temporadas que podrán ser fácilmente consumidas por su comunidad.
Ha sido esa una de las funcionalidades anunciadas por YouTube para seguir transformándose en la nueva gran señal televisiva.
Esa en la que coexisten como en ningún otro lugar los medios, los creadores, las grandes producciones, los contenidos generados por los fanáticos, los deportes y las celebridades.
Ni siquiera el video corto, me asegura Kurt Wilms, se ha visto perjudicado por la adopción masiva de un visionado a través de las pantallas de TV.
Ha podido más, advierte, el factor social que representa poder compartir una misma experiencia de consumo con amigos o familiares.
De a poco la efervescencia del consumo personal de contenidos readopta algunas prácticas comunitarias de visionado colectivo en espacios físicos.
YouTube no es sólo la televisión personal que consumimos en el smartphone.
Es también la nueva televisión colectiva en torno a la que nos reunimos para conversar sobre aquello que estamos viendo.
Como ocurrió, por ejemplo, con los Juegos Olímpicos de París 2024 a través de ClaroSports en YouTube.
O como ocurre potencialmente con el boom de los medios argentinos que tienen el streaming como su principal plataforma.
Le pregunté a Kurt qué opinaba sobre los medios convencionales transmitiendo a través de YouTube sin capitalizar las interacciones que se generan con la audiencia.
Aseguró que a cada medio y creador le toma su tiempo evaluar y decidir qué tipo de protagonismo le da a su comunidad.
Pero en el fondo, con YouTube volcado a esa integración definitiva de herramientas interactivas en el visionado desde una pantalla de TV, queda claro que si algo demanda la nueva televisión es contemplar no sólo un camino para ser consumido, sino un camino para empoderar a la audiencia a ser parte medular de lo que se está generando.
Bienvenida la nueva televisión a la vieja televisión.